En el transcurso de la vida, es necesario darse cuenta de cómo nos estamos tratando a nosotros mismos, cómo tratamos a los demás y cómo nos están tratando ellos a nosotros, aspectos sumamente importantes para lograr una vida emocionalmente estable y saludable.
Casi siempre las relaciones conflictivas con las demás personas resultan siendo un reflejo de cómo nos estamos tratando a nosotros mismos.
Qué te estás diciendo cuando cometes un error? "Soy un desastre... siempre hago lo mismo", "Soy un tont@." y hasta cosas más fuertes. O por el contrario eres más comprensiv@ y dices: "Bueno esta vez me equivoqué, estaré más atent@ para la siguiente ocasión", "Soy humano y puedo cometer errores, pero mejoraré" y te tratas con amor. ¿Cuál de las dos formas predominan en ti?
De cómo nos estamos tratando continuamente, depende también, como nos estarán tratando los demás. Si tenemos una relación hostil con nosotros, no podemos esperar que otras personas nos traten con cariño, respeto y buena voluntad y así mismo, al relacionarnos mal con nosotros mismos, también tendemos hacerlo con las otras personas y eso nos creará dificultades con ellos.
Finalmente por lo dicho líneas arriba, es necesario que reflexionemos y estemos atentos al trato que estamos acostumbrados a darnos y de lo que pensamos de nosotros y nos dispongamos a rodearnos con la energía sanadora del amor. Sólo actuando de esa manera podremos crear personas y relaciones saludables.
Casi siempre las relaciones conflictivas con las demás personas resultan siendo un reflejo de cómo nos estamos tratando a nosotros mismos.
Qué te estás diciendo cuando cometes un error? "Soy un desastre... siempre hago lo mismo", "Soy un tont@." y hasta cosas más fuertes. O por el contrario eres más comprensiv@ y dices: "Bueno esta vez me equivoqué, estaré más atent@ para la siguiente ocasión", "Soy humano y puedo cometer errores, pero mejoraré" y te tratas con amor. ¿Cuál de las dos formas predominan en ti?
De cómo nos estamos tratando continuamente, depende también, como nos estarán tratando los demás. Si tenemos una relación hostil con nosotros, no podemos esperar que otras personas nos traten con cariño, respeto y buena voluntad y así mismo, al relacionarnos mal con nosotros mismos, también tendemos hacerlo con las otras personas y eso nos creará dificultades con ellos.
Finalmente por lo dicho líneas arriba, es necesario que reflexionemos y estemos atentos al trato que estamos acostumbrados a darnos y de lo que pensamos de nosotros y nos dispongamos a rodearnos con la energía sanadora del amor. Sólo actuando de esa manera podremos crear personas y relaciones saludables.
Siempre tan atinados tus posts Carmen Rosa. Por más que en teoría son cosas que sabemos, a veces lo olvidamos con el diario ir y venir.
ResponderEliminarGracias y que tengas un buen fin de semana!
Gracias SOÑADORA. Es cierto, hay muchas cosas que tendemos a olvidar a veces siendo necesario que nos sean recordadas de alguna manera y es mejor hacerlo antes que surjan las dificultades.
EliminarUn abrazo y una semana feliz para ti